Autor: William Shakespeare
Género: Tragedia
Año: 1605
País: Inglaterra
Idioma: Inglés
Traducción de Jacinto Benavente. Madrid, junio de 1911
Páginas: 93
Editorial Océano de México S.A. de C.V.
ISBN: 970-651-345-0
Un clásico de Shakespeare, una de sus obras magnas, y, a mi concepto, una de las obras más complejas e interesantes de llevar a escena. Después de leer: Romeo y Julieta, Sonetos, Macbeth, Otelo, Hamlet y Julio Cesar, siendo Otelo mi favorita; sin embargo, El Rey Lear ha despertado en mi una curiosidad y fascinación infinata por conocer un poco más allá de lo que la obra nos muestra. Si bien la obra está escrita en 5 actos, el trasfondo que tiene la historia y sus personajes no tiene fin.
ANATOMÍA EN "EL REY LEAR"
Y sí, estoy hablando de "El Rey Lear", un personaje tan ´profundo y verdadero, como el ser humano mismo, que, al igual que Hamlet, representan a la humanidad entera en un par de líneas. Pero que, a diferencia de Hamlet, la perdición de Lear es el amor desenfrenado y en exceso. Después, de leer y re leer la obra, buscar análisis y comparar la obra con grandes escritos de la literatura universal, además de leer a expertos en el tema, tales como: Harold Bloom, analista de las obras completas de Shakespeare y la Royal Shakespeare Company, he llegado a varias conclusiones y puntos de exposición de lo que "El Rey Lear" representa para mí. Acontinuación, se podrá apreciar, un análisis completo de la obra, con miras; no a comprender a un personaje como éstos, y si bien representa el poder y la tragedia de lo que se convierte el pensamiento humano, al igual que "Hamlet", se debe tener en claro que es un personaje fictisio, al igual que la mayoría de acontesimientos que ocurren en la obra; por lo contrario, a observar con lupa lo humano y decadente que envuelve a la tragedia.
INTRODUCCIÓN Y RESEÑA
El "Rey Lear" ha despertado en mi una curiosidad y fascinación infinata por conocer un poco más allá de lo que la obra nos muestra. Si bien la obra está escrita en 5 actos, el trasfondo que tiene la historia y sus personajes no tiene fin.
Para situarnos en el contexto histórico, en el que fue escrita la obra, debo mencionar que fue escrita en 1605, bajo el segundo periodo de madurez de Shakespeare (el momento culmine de su obra artistica). En esta obra, como en algunas otras, Shakespeare toma un referente histórico. El del rey Oku de Britania en el siglo VII a.C., que divide su reino entre sus tres hijas conforme al cariño que éstas sientan por él (al igual con la obra). El dato es tomado del libro Historia regum Britanniae, escrita por el gales Godofredo de Monmouth en 1130 hasta 1136 (tomado de William Shakespeare - Obras Completas. Página 98).
El Rey Lear nos cuenta la historia de un rey en su vejez. Un hombre entrado en años que busca un poco de descanso y afecto fraternal, que después de haber cumplido con su deber como rey, decide abdicar al trono y repartir su reino entre sus tres hijas: Gonerila, Regania y Cordelia. La medida que él usa para repartir tal herencia es la manera en que sus hijas le expresen su amor. Gonerila y Regania expresan de manera lisonjera el amor que sienten por su padre, mientras que Cordelia, indignada por la falsa palabrería de sus hermanas, expresa con verdad y sencillez el amor que siente por su padre, Lear, al verse decepcionado por sus palabras, la aborrece y exilia del reino, quitándole su dote y su herencia. Paralela a esta historia se encuentra la historia de Gloster y sus dos hijos: Edgardo y Edmundo, siendo éste último bastardo, con la única idea de usurpar el lugar de su hermano y vengarse de su padre. Lo grandioso y épico de esta historia son las luchas de poderes y ambición que cada uno de los personajes tiene para obtener lo que quiere, además, a diferencia de otras obras de Shakespeare, El Reay Lear expone con mayor profundidad los deseos y las ambiciones del hombre, lo oscuro y lo retorcido de la mente humana.
Leer esta grandiosa obra ha sido para mí una experiencia única, de las pocas que he tenido, donde el autor puede desnudar, y, de manera introspectiva cavilar en los pensamientos y sentimientos humanos. Personajes como los de Gonerila y Regania, las dos hijas de Lear, deja al lector mucho que desear acerca de los núcleos familiares actuales, pues los conflictos que Shakespeare propone, son los conflictos de siempre, sin importar la época o la condición social. Los monólogos de Gonerila, para hacerse del poder y usar a su hermana Regania para cumplir sus acometidos, son de admirar. Sin embargo, a pesar de que el lector crea que Gonerila es "la bruja mayor", Regania es mucho más astuta que su hermana, como dice un viejo adagio: "De las aguas mansas líbrame Señor, que de las turbias me libro yo". Paralelos a estos personajes, se encuentran los de Edgardo y Edmundo, llevándose este último la admiración, pues Edmundo es la representación del rencor, la astucia y la avaricia. Algo clave que el lector debe entender al momento de leer una obra de Shakespeare, y no solo de Shakespeare, es que no pude juzgar a los personajes, nunca se debe juzgar a un personaje con "bueno o malo", es decir, hay características que el lector no puede negar, pero aun así, jamás puede negar la experiencia del personaje ni su caminar, pues el lector no ha estado en sus zapatos. En nuestro caso particular, Edmundo, es un hombre del común, el cual quiere "quitarse" la mancha de bastardo a como de lugar, demostrando que es igual o mejor que su hermano legítimo. En mi caso particular, Edmundo, se ha llevado gran parte de mi admiración por ser un personaje valiente y ambicioso, que sabe lo que quiere, y no importará lo que tenga que hacer para lograr sus acometidos.
El Rey Lear, es una obra como pocas en la historia de la literatura, dónde se expone las relaciones familiares y de estado en forma atípica, dónde cada personaje obra conforme a su realidad y a sus deseos. Una tragedia en la cual el autor desafía los convencionalismos de lo que la familia y el estado debe ser.
ORÍGENES Y FUENTES
Si bien, anteriormente mencionamos los orígenes de Lear en el paralelo rey Oku de Britania, Astrana Marín, sugiere que el suceso fue basado, al igual que muchas obras de Shakespeare, en relatos anteriores u obras ya escritas, como "El Rey Leir", escrita entre 1593 y 1594, obra con la misma idea contextual. Ahora, traductores como Jorge Plata, sugieren que el relato fue tomado de un hombre adinerado en la metrópolis de Londres de la época, que a punto de morir y repartir su herencia, pide a sus hijas la más profunda declaración de amor; lo inverso en la obra es que, aunque sus dos primeras hijas se hagan de la fortuna de su padre, es Cordelia, la que termina con la fortuna de su padre, por disputas entre los dos esposos de Gonerila y Regania. En fin, fuese cual fuese el verdadero origen del relato de Shakespeare, es el magistral contenido literario que cada una de sus lineas tiene.
La obra de Lear, como lo dice Harold Bloom, trasciende, tal vez, los límites de la literatura (559), y es esta trascendencia lo que genera el árdido interes de saber ¿Dónde surge? o ¿Cómo fue construida?. He dicho, anteriormente, que los origenes del relato son muchos, pero si se debe precisar, que el origen de su contenido es un poco más preciso.
Es así, como me encamino a descubrir que Lear, al igual que el santo Job, tienen una historia bastante similar. Ambos tenían el poder mismo en sus manos, ambos vieron la gloria de sus riquezas, ambos caen bajo la mano de Dios, y ambos padecen, sordidos y solitarios, en los días de su vejez, claro está que, el final de Job es apacible, pues recibe la recompensa por su paciencia, mientras Lear cae vertiginosamente por los excesos de un sentimiento fallido hacia los suyos. Es probable que Shakespeare haya oído en los días de su juventud los libros poéticos y apócrifos como: Salmos, Proverbios, Eclesíastes y Cantar de los Cantares,y que más adelante, en Londres, haya decido leer los por cuenta propia. En el acto IV, escena VI, el diálogo entre Lear y Gloster, en el momento en momento en que Lear afirma que el hombre viene llorando al mundo y parte llorando; fue el rey Salomón quien lo mencionó primero, en uno de sus escritos, (Sabiduría 7:1-6) haciendo énfasis al mencionar que el hombre es poca cosa, nada. Y si bien Salomón fue el arquetipo de rey valeroso en la cúspide del reinado de Isarael, y también la decadencia y la división de la Isarael pagana; Lear dista mucho de haberse convertido en ese arquetipo.
Al igual que Lear, el bufón es uno de los personajes más astutos en toda la obra, y esta astucia, según Harold Bloom, no es gratuita. En la primera escena que el bufón aparece, acto I, escena IV, toda la retahila de buenos consejos que el bufón da a Lear, están basados en pequeños versículos bíblicos, que se encuentran en los Proverbios y el libro de Marcos. La poesía métrica de Shakespeare altera un poco los originales de los libros; pero en la versión al español de Jorge Plata, se recupera con claridad el sentido de estos versos bíblicos. Y si para el noble e "ingenuo" Edgardo, "La madurez lo es todo", para Hamlet, "La disposición lo es todo"; para Jesús, "El espíritu está dispuesto, pero la carne es débil". Es de esta manera, que el juego de palabras y el ingenio de Shakespeare, no sólo en esta obra, se debe en gran medida, a la sabiduría puesta en las sagradas escrituras. Pero aun así, es la "Invensión de lo Humano" lo genial en Shakespeare, ver la manera en la cual desnuda al hombre, poniendo a un poderoso al mismo status que un mendigo, pues anuncia el fin y el comienzo de la naturaleza y destino humano.
LEAR Y LAS TABLAS
Si "El Rey Lear" se convierte en una de las experiencias de la cúspide literaria, por su gran contenido y forma, es la magnificiencia de su representación, lo que se lleva todos los focos de atención. Grandes actores y directores han tomado el gran reto de llevar a la representación, una de las cinco grandes tragedias de Shakespeare, siendo de esta manera, uno de los mecanismos para medir el aceite de un actor. Aun así, es frecuente que la mayoria de actores y directores queden derrotados por lo ingenuo y obvio que pueden convertirse sus primeras lecturas, pues a mi concepto, "El Rey Lear" es una obra que se debe leer y re leer hasta entender los secretos profundos que se encuentran metidos en esta gran obra. Ahora, si no podemos lograrlo, el error está en nosotros, y en la decadencia de nuestra cultura cognitiva y letrada.
Después de ver cuatro films, entre teatro y cine, y de ver a los grandes de la actuación; como Ian Mackelan o Simon Russell, entre los más actuales, quienes han encarnado el papel de Lear; me dí cuenta, lo falto de comprensión que nuestro oído tiene, al escuchar palabras tan grandes en bocas de voces humanas. Muchos de sus diálogos reververan en mi cabeza aún sin sentido y comprensión.
Yendo en orden cronólogico, El Lear de Gregori Kozinzev, pieza clásica de 1971, muestra a un Lear, metidabundo, loco en la cordura, caído en la dignidad, noble en la pobreza y miserable en su reino. Creo que el director ruso, es uno de lo que más se aproxíma a lo que Lear debió ser, un mendigo que fue rey, pero al fin de cuentas rey, que es algo que la mayoría de montahes pierden, mostrando a Lear como una más. La impecable actuación rusa, deja ver una escena impecable, tanto a fondo como a forma, por eso, es a mi concepto la mejor.
El Lear de Ian Mackelan, dirigido por Trevor Nunn, film estrenado en nochebuena de 2008, es una producción un poco más "inglesa" si se lo puede llamar así, una amalgama de lo antiguo y lo moderno, un híbrido de lo que la obra fue y lo que es ahora. Mackelan encarna con gran decoro y status el papel principal, pero a mi concepto, son Ramola Garai y Monica Dolan, en los papeles de Cordelia y Regania, respectivamente, las que se llevan las ovaciones, pues muestran un poco más a profundidad lo no obvio de los personajes, llevándolos a otro nivel, con más matices y participación en la obra, lo que en otros films no puede apreciarse.
Otro de los grandes, es sin duda, "RAN" (miseria en español), una de las mejores adpataciones que se ha hecho acerca de "El Rey Lear". El aclamado director japonpés, Akira Kurosawa, decide transformar un poco la escencia de Lear, y llevar la tragedia a lo que es a la cultura japones, mostrando la miseria y la caída de un gran imperio. En esta película, a diferencia de la obra original, se puede apreciar de manera clara, el conflicto político y la miseria social a la que se ve enfrentada el imperio tras las deciciones de su rey, cosa que en la obra original se deduce, pero no se muestra, o no a simple vista. La avaricia y el amor excesivo hacia el poder, envuelve la obra, y es Kurosawa quien lo lleva a su máximo nivel, haciendo esta gran adaptación, tal vez, la mejor que se ha hecho hasta el día de hoy, y sin duda, la mejor que el director hizo en toda su carrera.
Finalmente, el 25 de septiembre, llegó a Colombia una de las grandes producciones del National Theater de Londres, por medio de Cinecolombia. "King Lear", dirigida por el ganador del Oscar, Sam Mendes, y protagonizada por el aclamado actor inglés Simon Russell, es la versión más contemporánea de lo que Lear es nuestros tiempos actuales, y cómo los excesos llevan a la perdición a lo protagonistas de la obra. En esta obra, a diferencia de otras, se muestra a un Lear bonachón, atrapado por el amor desenfrenado y la falta del mismo lo que lo lleva a la decadencía. También, se mira con claridad a unas hijas estrategas, fuertes, cada una diferente a la otra y con intensiones y objeticos claros en medio de la obra. De igual manera, los juegos de status, y la realeza que despliega la monarquía británica son apreciadas en esta obra. Sin embargo, son los papeles de Gonerila y Edmundo, los que se roban el foco de la obra, la exploración de ambos personajes llevados a los extremos, deja ver al desnudo, la concepción original que Shakespeare tuvo al crear los. Además, en esta obra, el actor Simon Russell, pone una enfermedad degenerativa en el personaje, lo que da mas sentido y credibilidad a su locura, manifestándolo de manera progresiva al interior de toda la representación.
LOS EXCESOS COMO CONFLICTO PRINCIPAL
Muchos análisis y escritos que circulan alrededor de la obra, cuentan de manera superficial los conflictos centrales de la obra, como: la locura, la avaricia, el poder, la lujuria, el amor, el genocidio, el fratricidio, la ambición, la codicia, la envidia, el engaño, los perros, los gatos, las coronas, etc. Todo en un mismo orden, sin distinción alguna y puesto en la misma tónica.
A mi concepto, el analista, Harold Bloom, profesor de humanidades de la universidad de Yale, y de inglés en la universidad de New York; el abre los ojos al lector acerca lo todos los tesoros escondidos que la obra tiene. Si bien, Shakespeare no tiene sub textos, como Chéjov y Stringberg. Es lo excesivo, el pecado principal, si se lo puede llamar así, que cometen todos los personajes de la obra. Son los excesos los que llevan a los grandes a una caída fatal. Es el excesivo amor que Lear tiene por Cordelia, lo que la hace repudiarla, lo que hace que divida su reino entre sus dos hijas, y es esa falta de amor, al igual que Job, lo que lo hace buscar la atención de todo un reino que clama por su abdicación; es este amor controlador, lo que hace que Lear rompa su imagen de autoridad, y como un niño caprichoso haga una pataleta por no conseguir lo que quiere. Es el excesivo amor que Cordelia tiene por su padre, lo que la hace callar y mostrar sincero su corazón ante su padre cuando este solicita una respuesta, y este mismo amor, lo que la hace partir a Francia sin protesta alguna. Es el excesivo amor hacia el poder que Gonerila y Edmundo tienen , lo que los lleva a confabular contra las autoridades establecidas, y finalmente, contra sí mismos. Es el exceso de lujuria lo que hace confiar a Regania en Gonerila y Edmundo, lo que lo la llevará a su destino final. Es el exceso de lealtad, respeto y admiración que Kent tiene hacia Lear, lo que lo hace seguirlo hasta el fin, y servirlo aún cuando este lo ha rechazo frente a toda la corte; es un sentimiento similar, el que embarga al bufón, aunque sin toda la parafernalia del respeto y admiración, pues es el bufón, el que se convierte en la conciencia del caído Lear y quién conoce el verdadero lugar que cada personaje ocupa alrededor de toda la obra. Es el exceso de ingenuidad, lo que hace a Edgardo confiar ciegamente en su hermano, y es parte de esta misma ingenuidad, aunque no tanta, lo que hace que Gloster no se de cuenta a tiempo de la conspiración que su hijo bastardo planea contra él. Es el exceso de odio y envidía, lo que llevan a Edmundo, uno de los "malos más malos" de Shekespare, a escepción de Yago, si se quiere "catalogar" de alguna manera, lo que lo lleva a hacerse del poder para si mismo a como de lugar.
Según Bloom, la figura del exceso o del derrumbe no abandonan nunca el texto de Shakespeare; pues todo el mundo odia o ama en demasía en esta obra. Ahora, la obra divide de manera similar a sus personajes; siendo Lear, Cordelia, Gloster y Edgardo, los "inocentes incautos". Los dos cariñosos hijos se muestran tercos y recalcitrantes, mientra que sus padres se muestran ciegos y testarudos. Gonerila, Regania y Edmundo, los "maquinadores perversos"; el uno complemento del otro, en todas las formas de triada que sean posibles, Edmundo, ajeno al amor, inmune a este sentimiento, pero si lleno de lujuria y avaricia enreda a las dos hermanas, que por el mismo sentimiento, terminan destruyéndose la una a la otra, y en consecuencia, destruyendo a Edmundo. Gracioso ¿no?.Ahora, sin que se deba catalogar a los personajes, son sus historias paralelas lo que muestra una realidad alterna de lo que sería el pecado llevado al extremo. Cada personaje tiene su simil en el otro, se complementan y se convierten en espejos de lo que ocurre en el interior de sus vidas. Lear y Edgardo, comparten el mismo desconcierto de identidad, que aparecen como nuevas manifestaciones del amor excesivo, que Shakespeare muestra como el verdadero amor entre padres e hijos y la consecuencia que este trae, la devastación. Parte de este argumento final, se encuentra en el libro de Habacuc, cuando el profeta dice: "Que no se levante la mano del hijo contra el padre, ni del padre contra el hijo, no sea que Dios venga y maldiga la tierra", que finalmente se convierte en la consecuencia del reiterativo exceso en la obra.
Según Samuel Johnson, otro gran crítico de Shakespeare, menciona que el amor es la sabiduría del tonto y la tontería del sabio, que de acuerdo con la obra, no se desvía mucho de la realidad. Por lo cual, es la idealización del valor universal que existe entre el amor familiar y el amor social, lo que indigna a la obra, y es como este amor paternal y filial, lleva consigo una naturaleza destructiva.
EL AHIJADO DE LEAR
En muchos análisis de la obra, críticos, eruditos, especialistas, escritores y contemporáneos, han escrito libros y centenares de ensayos, críticas y reseñas acerca de cada uno de los personajes de esta obra. Pues bien, mi crítica y reseña va a ser acerca de un personaje, que a mi parecer es uno de esos tesoros en el claro oscuro de la dramaturgia. Edgargo, el personaje que más lineas tiene, a excepción de Lear; el portavoz de Shakespeare, el chivo expiatorio de la tragedia, la antítesis de la obra. Un personaje que termina siendo el monarca de un reino invadido por los lobos.
Edgargo, es la anítesis de su hermano Edmundo, mientras el primero es un seductor, astuto como una serpiente; Edgardo es inocente, ingenuo, cándido, crédulo, el paralelo a Cordelia, y aunque con su frase "La madurez lo es todo" y persiga el control retórico sobre todo el mundo, es esa falta de madurez, lo que lo convierte en el martir de la obra. No es casualidad que se encuentre con el debastado Lear en el acto III, escena IV, para intentar reivindicar el honor familiar en medio de la obra. Para este punto de la tragedía, ambos están locos, ambos huyen de sus excesos, ambos se esconden de un actos fratricidas por parte de sus familiares, pero aun así, ambos buscan defender el honor y la justicia. Por eso no es coincidencia, que sea Edgardo, quien termine heredando el trono, es lo menos que puede ocurrir, después de que todo el peso de cinco sufridos actos recaigan sobre él.
Interpretar a Tom el loco es una educación en la violencia interna, y hasta cierto punto Edgardo se acerca a la locura al simularla, muy al estilo de Hamlet. Es en este maravilloso acto, cuando Lear se dirige a su ahijado para llamarlo "filósofo". Es la ironía de Shakespeare la que nos muestra como Tom sirve de mentor a Lear al rumbo del abismo, pues ambos se encuentran en la decadencia absoluta, sus cantos y estribillos impulsan al soberano a una reflexión catastrófica, además de llevarlos a la conclusión de fue el amor el que los llevó a la perdición.
Ahora, en toda obra de Shakespeare es necesario que alguien sufra. Sí, es curioso, pero es verdad. Desdémona en "Otelo", Julio César en "Julio César", Ofelia en "Hamlet", y en "El Rey Lear", el papel le corresponde a Edgardo, Shakespeare lo elige por su inocencia y pureza de corazón, el Cristo perfecto para limpiar la maldad de la tierra, y hacer que los cielos se reibindiquen con la tierra. Es decir, después de Hamlet, Edgardo es el estigma central de las tragedias Shakespereanos. Finalmente, su recompensa o su castigo por candidez, o como el lector lo quiera tomar, es ser el nuevo rey de Britania, un reino que después de cinco actos y la muerte de su realeza, por fín ve la luz del día, iniciando con él, una nueva era. No se sabe que viene después para el reino, o que pasa en la vida de Edgardo, pero es claro que la conclusión del mal, al igual que en "Hamlet" y "Macbeth" hace que la tierra sea saneada.
UNA OBRA PAGANA PARA UN PÚBLICO CRISTIANO
Como ya he sido bastante reiterativo, con respecto a lo bíblico en la obra, tomandose varias citas, desde el antiguo hasta el nuevo testamento; acerca de lo que podría ocurrir cuando los excesos se apoderan de nuestras carnes y el frenesí por saciarnos a nosotros mismos nos posee; debo aclarar que aún así, está más allá de cualquier institución religiosa e idiología política, siendo una obra pagana para un público cristiano.
Después de "Hamlet" obra que recibe a Jacobo I como soberano de Inglaterra, que nos muestra lo que ocurriría con un golpe de estado y la traición a la corona, "El Rey Lear" no tiene la intención de comparar o enseñar a la monarquía, aunque Lear, es un pequeño símil de Jacobo "el sabio", sabio a manera de sarcasmo, por todas las desfachateces que cometió, y aunque a él le fascinaba ser comparado con Salomón, Jacobo se distancia mucho de lo que el rey judío fue.
No puedo imaginar, la controversia que esta obra pudo generar en la época. Si bien; fue estrenada a finales de 1606, y que tiempo después sería re escrita y mejorada por el mismo Shakespeare, lo que llamamos, limpieza y decoro de una obra; a mi concepto la obra debió ser un fracaso, es decir, tal vez ni el mismo Shakespeare sabía lo que se traía entre manos, y una obra como estas, claramente se construye con el público.
CITAS
LEAR: Señal de no estar vacío el corazón cuando las palabras salen de él apagadas, no huecamente retumbantes.
LEAR:No es el amor amor, cuando atiende a lo que no es su esencia.
LEAR: Comienza a pesarme la ociosidad inútil en que nos tiene la sujeción a una vejez tiránica, que nos oprime, no por ser ella fuerte, sino por ser nosotros sufridos.
KENT: Yo hice mi profesión de ser lo que parezco: servir lealmente a quien confía en mi lealtad, amar al que es honrado, conversar con el que sabe mucho y dice poco, temer los juicios de los hombres, pelar cuando no es posible otra cosa y no comer de pescado.
EDMUNDO: Lo que pueda hacer cualquier hombre puedo yo hacerlo; lo mejor de mi condición es ser diligente.
EDMUNDO: Ni soy tan mozo que pueda prendarme de una mujer por la sola gracia de sus canciones, ni tan viejo que pueda enamorarme de la que no tiene gracia alguna.
BUFÓN: Los locos han perdido su gracia este año, porque los cuerdos han caído en una amanerada afectación, que, no sabiendo ya qué hacer con su ingenio, han dado en hacer locuras.
EDMUNDO: Buenas noches fortuna. ¿Cuándo volverás a sonreírme? ¡Gire la rueda!
EDGARDO: Loco es el que confía en mansedumbre de lobo, en saludo de caballo, en amor de niño y juramento de ramera.
EDMUNDO: El que se juzga solo en su tristeza la ve aumentada en su imaginación, que solo recuerda a lo que viven alegres y dichosos, como nosotros antes.
GLOSTER: Más vale ser despreciado a sabiendas, que ser despreciado entre adulaciones.
GLOSTER: Cualquier mudanza es temible para el dichoso; el desdichado la ve llegar con alegría.
LEAR: La vida es corta y la recompensa será mezquina.
0 comentarios:
Publicar un comentario